Nos estamos adentrando en la temporada de verano, el aumento de la temperatura y de actividades físicas puede implicar un aumento de la prevalencia de lesiones en personas de todas las edades y condiciones físicas. ¿Cómo prevenir lesiones durante la temporada de verano?
El realizar actividades que no se realizan durante el año con tanta intensidad, como puede ser hacer trekking por la montaña o visitar caminando durante muchas horas ciudades, entre otras, puede hacer crecer la posibilidad de sufrir diferentes algias y disfunciones. Además, este aumento de actividad puede asociarse al hecho de la utilización de un calzado inadecuado. Las altas temperaturas pueden implicar un aumento de la utilización de las chancletas y sandalias, muchas veces inapropiadas a partir de ciertas distancias o duración de las rutas. Esta suma de factores puede acabar desarrollando disfunciones como la fascitis plantar; irritaciones neurales a nivel de la pierna, tobillo y pie; dolores musculares; poder realizar un buen diagnóstico diferencial desde los profesionales sanitarios adecuados será el factor clave para desarrollar un correcto tratamiento y un mejor pronóstico. Una de las soluciones para prevenir estas lesiones puede ser una cuidadosa elección del calzado, ya la vez una buena planificación de la ruta que se realizará con paradas obligatorias donde la persona deberá poder descansar.
Otras actividades que incrementamos exponencialmente en la temporada de verano son las actividades acuáticas. Gesto particulares como los de nadar en el mar o en la piscina, snorkel, submarinismo o piragüismo, pueden implicar lesiones por sobreuso o por mala técnica, pudiendo sufrir conflictos en el espacio subacromial, tendinopatías del manguito de los rotadores o aparición de puntos gatillo miofasciales, causantes de dolor y deficiencia, limitando tanto las actividades deportivas como las diarias. Para poder prevenir lesiones durante la temporada de verano, la persona debería realizar un calentamiento adecuado, un control de cargas aplicadas y descansos en intervalos de tiempo, para poder calibrar mejor qué cargas se pueden llegar a aplicar, existe la posibilidad de dirigirse a los profesionales adecuados para conjuntamente llegar al objetivo marcado.
Por otra parte, es frecuente poder sufrir lesiones traumáticas, fruto de contusiones o caídas, desarrollando actividades de mayor riesgo como caminar por las rocas tanto en la playa como en la montaña, bicicleta de descenso, patinar con patines de línea, barranquismo, vías ferratas , etc. Estas lesiones se pueden minimizar utilizando los protectores adecuados para cada una de las actividades, como la utilización de casco, coderas, tobilleras, entre otros.
La temperatura en esta época del año también puede implicar la posibilidad de sufrir trastornos vasovagales de cierta gravedad. Se pueden prevenir lesiones durante la temporada de verano, teniendo una buena hidratación durante el día, limitar la actividad física durante las horas de mayor calor, protegerse del sol con gorro, gafas de sol y crema solar, además , de tener una alimentación rica en vitaminas y minerales.
En conclusión, ¿cómo prevenir lesiones durante la temporada de verano? Controlando toda esta serie de variables, minimizando el riesgo de lesionarse. Por eso, no dudes en consultar en los profesionales de salud adecuados, en la Unidad de Medicina Deportiva tenemos a todos los profesionales necesarios para un abordaje óptimo, trabajando como equipo transdisciplinar.
¡Una prevención de los posibles riesgos puede ser el factor clave para poder disfrutar de una buena temporada estival!